Ficus es el nombre antiguo de la higuera, mientras su epíteto específico rinde homenaje a Horace-Bénédict de Saussure, naturalista suizo. También es frecuentemente conocido por el sinónimo F. afzelii, cuyo epíteto es en honor del botánico sueco Adam Afzelius (1750-1837), quien recolectó diferentes especies en Sierra Leona. Este ficus es africano, y está presente en Sudán, Kenia, Tanzania, Uganda, Camerún, Congo, Guinea Ecuatorial, Zaire, Costa de Marfil, Ghana, Nigeria y Sierra Leona.

Como sucede normalmente con los ficus, se multiplica fácilmente por esquejes y acodos aéreos, ya que para que sus higos tengan semillas fértiles, requieren de la polinización de especies muy concretas de avispas (Agaonidae) con las que tienen una relación de mutualismo, que no suelen estar presentes fuera de sus lugares de origen.

Esta especie en concreto es tropical, y requiere cultivarse en zonas cálidas, con suelos ligeros y fértiles, por lo que sólo se utiliza como ornamental en zonas cálidas y subtropicales. Sus higos son amarillo-anaranjados, incluso rojizos, y sus hojas tienen una marcada nervadura.